El mundo de la tecnología de consumo está en crisis. Si estás armando un nuevo equipo de juegos o simplemente pensando en actualizar tu portátil, prepárate para sentir un golpe fuerte y doloroso en tu bolsillo. Los precios de las memorias para PC se han disparado drásticamente, y lo peor aún está por venir para las unidades de estado sólido (SSD) y, con el tiempo, para todos los dispositivos tecnológicos que usas.
Esto no es un fallo en la matriz del mercado. Es una consecuencia directa e implacable del auge de los centros de datos de IA. Las empresas están invirtiendo billones en el entrenamiento de enormes modelos de IA como ChatGPT-5 y Google Gemini 3, y estas redes neuronales tienen una voracidad insaciable de chips de memoria especializados. Los fabricantes de chips, naturalmente, están siguiendo el dinero.
Los aumentos de precios ya son una locura. El precio promedio de las memorias RAM de consumo en Amazon ha subido más de un 240% tan solo el año pasado, según Tom’s Guide. Algunos productos, como un kit Crucial DDR5 de 32 GB, han más que duplicado su precio desde mayo, y un kit Corsair Vengeance RGB de alta gama se disparó de unos $100 en verano a unos miserables $410 en tan solo unas semanas, señala PC Gamer. Otros kits simplemente han desaparecido de las tiendas.
La IA se está comiendo el mundo (y los chips que lo hacen funcionar)
La raíz de esta crisis es una clásica restricción de la oferta y la demanda, agravada por el hecho de que sólo un grupo muy pequeño de fabricantes suministra la mayor parte de la RAM del mundo. Sólo tres grandes empresas controlan aproximadamente el 95% de la producción mundial de DRAM (memoria dinámica de acceso aleatorio), los chips fundamentales tanto para la RAM como, cada vez más, para los SSD. Se trata de los gigantes surcoreanos Samsung y SK Hynix, junto con el fabricante estadounidense Micron Technology.
El problema es que los gigantes de la IA, como Oracle, AWS y OpenAI, necesitan una gran cantidad de memoria de alta velocidad, denominada memoria de alto ancho de banda (HBM). Esto implica menos espacio de fabricación para la DRAM que se instala en las memorias RAM de su PC.
Los fabricantes de DRAM están reasignando su capacidad de producción a memoria de alto ancho de banda (HBM) para aceleradores de IA como el B300 de Nvidia, dejando prácticamente nada para el mercado de consumo. Como informó Tom’s Hardware, este cambio ha provocado un aumento masivo de precios en la memoria DDR y LPDDR estándar, y lo peor está por venir.
Micron canceló recientemente su marca “Crucial” de RAM y SSD asequibles, una de las favoritas de los gamers durante casi tres décadas. La compañía afirmó que, en su lugar, “mejoraría el suministro y el soporte” para sus “clientes estratégicos más grandes en segmentos de mayor crecimiento”.
En diciembre, los precios de los contratos de DRAM y NAND se dispararon hasta un 100% en un solo mes. Un chip DDR5 de 16 gigabits que costaba $6,84 en septiembre se vendía a $27,20 a principios de diciembre. “En esencia, solo la memoria para un módulo de 16 GB cuesta alrededor de $217,6”, según Gerry Chen, director general de TeamGroup, entrevistado por Tom’s Hardware. Advirtió que la escasez empeorará a principios de 2026 y que la solución podría no llegar antes de 2028.
Esto no es sólo un problema de PC
La crisis no se limita a los fabricantes de computadoras de escritorio. Los chips RAM y NAND son componentes críticos en casi todos los dispositivos electrónicos modernos.
La tecnología de uso diario se encarecerá, así que prepárense para laptops, tabletas e incluso smartphones más caros para todos. Los precios de dispositivos futuros como el iPhone 18 y Steam Machine probablemente se verán afectados. También se espera que el precio de las consolas de videojuegos se dispare debido a la escasez.
Los SSD son los siguientes. Si bien los aumentos de precio en los SSD han sido más moderados, el consenso en la industria es que es solo cuestión de tiempo. El director ejecutivo de Phison, especialista en controladores SSD, ya ha advertido sobre la escasez de chips flash NAND, lo que ha provocado la duplicación de los precios en los últimos seis meses, y predice que la demanda probablemente superará la oferta durante varios años, según informa PC Gamer.
Esta crisis está obligando a los fabricantes a repercutir los costes. CyberPowerPC y Maingear ya han advertido que el aumento de los precios de la memoria a nivel mundial ha tenido un impacto directo en el coste de fabricación de PC para juegos y les está obligando a subir los precios.
Posibilidades para el futuro
Entonces, ¿cuándo termina la agonizante subida de precios? Los expertos del sector ofrecen dos plazos muy distintos.
Una posibilidad es la larga espera. Analistas y fabricantes predicen que la sequía podría durar años. Incluso si los tres principales fabricantes de chips decidieran construir nuevas plantas de fabricación multimillonarias hoy, tardarían al menos tres años en estar operativas. Micron está invirtiendo US$10.000 millones en una nueva planta de DRAM, pero la producción no comenzará hasta 2028.
La otra posibilidad es el colapso repentino si la burbuja de la IA estalla. OpenAI ha comprometido US$1,5 billones en chips, lo que algunos consideran “muy burbujeante” considerando sus bajos ingresos actuales. Se proyecta que solo el proyecto Stargate de OpenAI costará US$500.000 millones. Si los retornos prometidos a la inversión en IA no se materializan, las empresas podrían frenar bruscamente la construcción de nuevos centros de datos. Como resultado, la demanda de chips se agotaría de la noche a la mañana, dejando los almacenes llenos de inventario sin vender. En ese momento, los precios se desplomarían, lo que representaría un shock sistémico para toda la industria. Por ahora, sólo nos queda esperar a ver qué nos depara el futuro.
Fuente: ZME Science.
