Los arqueólogos han descubierto los restos de una sandalia romana de 2.000 años de antigüedad cerca de un antiguo fuerte militar en Alemania. Los investigadores desenterraron el calzado de estilo militar mientras realizaban trabajos de excavación en un asentamiento civil en las afueras de un fuerte militar romano cerca de Oberstimm, una ciudad en el estado de Baviera. El asentamiento habría sido ocupado en algún momento entre el 60 y el 130 d.C., según una declaración traducida de la Oficina Estatal de Preservación de Monumentos de Baviera (BLfD).
Del zapato de cuero, que los investigadores analizaron mediante rayos X, sólo quedó la suela y algunas “uñas bien conservadas”. Las radiografías revelaron que el zapato era una caliga, una sandalia con clavos de alta resistencia que formaba parte del uniforme entregado a los soldados y auxiliares de los legionarios romanos. El zapato se habría usado mientras la persona marchaba y los clavos proporcionarían tracción. Las caligae protegían contra ampollas y afecciones como el pie de trinchera, según el Museo Trimontium de Escocia. El tercer emperador romano, apodado Calígula o “bota pequeña”, recibió su apodo cuando era niño de los soldados de su padre.
Sin embargo, el ejército romano comenzó a dejar de usar estas sandalias a fines del siglo I d.C., según el museo. En ese momento, los soldados romanos solían usar botas cerradas conocidas como calcei.
Restos de sandalias
“Las llamadas caligae fueron usadas principalmente por los soldados romanos durante el Imperio Romano”, dijo en el comunicado Amira Adaileh, consultora de BLfD. “El hallazgo deja claro que las prácticas, el estilo de vida y la vestimenta que los romanos trajeron a Baviera fueron adoptados por la población local”.
Además de las sandalias, los arqueólogos encontraron restos de comida, cerámica, una hoz y “componentes de vestuario” en el lugar del asentamiento, según el comunicado.
“Los hallazgos sorprendentes, como la suela de zapato de Oberstimm, dejan claro una y otra vez que se recopila información valiosa incluso después de finalizar las excavaciones arqueológicas”, afirma en un comunicado Mathias Pfeil, curador general del BLfD.
Fuente: Live Science.