Los niños que crecen en áreas verdes tienen un IQ más alto y mejor comportamiento

Psicología

Un nuevo estudio sugiere que los niños que crecen en áreas urbanas con mayor vegetación tienen mayor cociente intelectual y menos problemas de comportamiento. Los hallazgos son otra muestra de la importancia del contacto con la naturaleza en el desarrollo infantil.

Un grupo de investigadores belgas evaluaron la inteligencia de 6000 niños entre los 7 y 15 años. Encontraron que el 3% que crecía en áreas verdes aumentaban su IQ promedio 2,6 puntos, este efecto cubría tanto las áreas ricas como pobres de Bélgica.

“Cada vez hay más evidencia de que los entornos verdes están asociados con nuestra función cognitiva, como las habilidades de memoria y la atención”, dijo al diario británico The Guardian Tim Nawrot, profesor de la Universidad Hasselt en Bélgica, donde se realizó el estudio. “Lo que este estudio agrega con el coeficiente intelectual es una medida clínica más sólida y bien establecida”.

Los investigadores usaron imágenes satelitales para observar el nivel de vegetación de las áreas de los niños evaluados. Revisaron parques, jardines, árboles en las calles. El IQ promedio de los niños era de 105. El 4% de ellos que tenía un puntaje menor a 80 creció en áreas menos verdes.

Ninguno de los niños que creció en áreas verdes tenía un IQ menor a 80. Sin embargo, el estudio sólo se aplicó en área urbanas. Aún no se sabe si aplica a suburbios o zonas rurales.

Los investigadores también midieron problemas de comportamiento como agresividad o falta de atención, usando una escala estándar. El puntaje promedio era de 46, con un 3% de aumento en zonas verdes a una caída de dos puntos en problemas de comportamiento, lo que coincide con hallazgos de estudios predios.

Los investigadores argumentan que este es el primer estudio que relaciona la inteligencia de los niños con el verdor de las zonas en las que crecen. Estudios anteriores habían demostrado que el crecimiento en espacios verdes es importante para el desarrollo cognitivo de los niños en cuanto a la memoria, la atención y el desempeño escolar.

Los resultados tendrán una importancia enorme en las políticas de salud pública. Siendo que en 1950 sólo el 30% de la población mundial vivía en áreas urbanas. Para 2050 se espera que esta cifra aumente al 68%.

Los residentes de las áreas urbanas por lo general tienen poco acceso a áreas verdes. Es por eso que debemos entender las diferencias en salud entre los que viven en áreas urbanas y los que viven en áreas rurales, a fin de mejorar la calidad de vida de las personas en un mundo cada vez más urbanizado, aseguraron los investigadores.

El estudio tiene sus limitaciones. Estaba basado en las áreas residenciales, pero la información acerca de la actividad escolar y los patrones de actividades, como jugar al aire libre no estaban disponibles, así como otros mediadores que relacionaran espacio verde con inteligencia.

Fuente: PLOS Medicine a través de Zmescience.

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