Un equipo de investigadores afiliado a una serie de instituciones en los EE. UU. ha descubierto que un anticuerpo que crearon tenía una eficacia del 99,9% para atrapar espermatozoides humanos. En su artículo publicado en la revista Science Translational Medicine, el grupo describe cómo desarrollaron sus anticuerpos anticonceptivos como alternativa a las formas hormonales de anticoncepción femenina.
La ciencia moderna ha brindado a las mujeres dos opciones básicas para prevenir el embarazo: mecanismos de bloqueo como condones o DIU, y hormonas administradas mediante inyección o píldora. Pero, como señalan los investigadores, todas estas opciones tienen inconvenientes que conducen a problemas para las mujeres. En este nuevo esfuerzo, los investigadores buscaron una tercera alternativa, una que implica el uso de anticuerpos.
Investigaciones anteriores han demostrado que ciertos anticuerpos en las vaginas de algunas mujeres pueden hacerlas infértiles. El año pasado, los investigadores obtuvieron algunos de estos anticuerpos de voluntarias y posteriormente eliminaron los componentes de unión al antígeno. Luego usaron esos componentes para diseñar un anticuerpo IgG que mostraba una propensión a unirse con los espermatozoides. Más recientemente, los investigadores agregaron cantidades escalonadas de los componentes a los anticuerpos IgG diseñados: 6, 8 y 10. Luego inyectaron plásmidos que contenían estos anticuerpos en células embrionarias humanas, lo que resultó en el crecimiento de nuevas células IgG con los componentes modificados. A continuación, los investigadores probaron la capacidad de sus células IgG para atraer y unirse con los espermatozoides en una placa de Petri y descubrieron que eran hasta 10 veces mejores para atrapar los espermatozoides que los anticuerpos originales extraídos de las mujeres voluntarias.
En la segunda parte de su trabajo, los investigadores inyectaron soluciones que contenían sus anticuerpos IgG en las vaginas de varias ovejas. A esto le siguieron inyecciones de esperma humano. Después de dos minutos, los investigadores recolectaron muestras de vaginas de oveja y contaron cuántos espermatozoides móviles pudieron encontrar. Al hacerlo, encontraron reducciones del 99,9% en comparación con los grupos de control.
Los investigadores señalan que se requiere más trabajo para determinar si su técnica podría convertirse en un tercer método anticonceptivo para las mujeres en el futuro. A continuación, planean averiguar si sus anticuerpos diseñados funcionarán de la misma manera en una vagina humana.
Fuente: Medical Xpress.