Los ingenieros de la startup noruega N2 Applied han anunciado en su sitio web que han desarrollado una tecnología que puede reducir la cantidad de amoníaco y metano en el estiércol de ganado. También señalan que el proceso también captura nitrógeno, que puede usarse como fertilizante.
Actualmente, el ganado produce tanto amoníaco como metano en forma de estiércol y orina. El primero puede formarse en nubes que se mezclan con otros químicos en el aire, lo que resulta en smog tóxico. Este último es un gas de efecto invernadero. Eliminar o reducir ambos también mejoraría la vida de los administradores de ganado, ya que los desechos del ganado tienen un olor fuerte. En este nuevo esfuerzo, los ingenieros han encontrado una manera de reducir los niveles de ambos en los purines del ganado (estiércol y orina mezclados con agua).
La tecnología detrás de la unidad N2, como la llaman, es un dispositivo que aplica electricidad al aire en las proximidades del estiércol; los ingenieros lo describen como disparar un rayo. Esto convierte los productos químicos en el aire en nitrógeno reactivo. La electricidad hace que el material en el aire se caliente tanto que forma una corriente de plasma, lo que resulta en la descomposición molecular y la liberación de electrones. Luego, el nitrógeno se absorbe en una suspensión líquida donde se evita que se escape en lo que sería una forma de amoníaco. La lechada se puede utilizar como fertilizante a base de nitrógeno.
En su anuncio, N2 Applied afirma que su dispositivo puede eliminar aproximadamente el 90% del amoníaco en una muestra de suspensión determinada y el metano en un 99%. El costo involucrado aún no está establecido. Una unidad de demostración creada por los ingenieros de N2 Applied fue alimentada por un panel solar.
Los miembros de la prensa fueron invitados a las instalaciones de prueba de N2 Applied en Buckinghamshire en Gran Bretaña, donde fueron invitados a realizar pruebas de olfateo. A cada uno se le entregó un recipiente que contenía lodo tratado y lo olfateó. La mayoría ha informado que, en lugar del olor habitual a amoníaco, la muestra olía más a vino en un caso y a aire marino en otro. El gobierno británico ha establecido objetivos para reducir las emisiones de metano del ganado, pero aún no está claro si el gobierno pagará por una tecnología como esta.
Fuente: Phys.org.