Todas las nubes de Neptuno han desaparecido y el Sol podría ser el culpable

Astronomía

Todas las nubes de Neptuno han desaparecido y los científicos creen que el culpable es el sol. La desaparición de las tenues hebras blancas de metano congelado que normalmente rayan la cara azul de Neptuno se ha relacionado con cambios en la radiación ultravioleta (UV) a medida que la actividad del sol alcanza un máximo de 11 años.

Las nubes alrededor del octavo y más distante planeta del sistema solar, ubicado aproximadamente a 4.500 millones de kilómetros del sol, comenzaron a desvanecerse en 2019 y desaparecieron sin dejar rastro en 2020. Los investigadores que hicieron el descubrimiento publicarán sus hallazgos en la edición del 1 de noviembre de la revista Icarus.

“Incluso ahora, cuatro años después, las imágenes más recientes que tomamos en junio pasado todavía muestran que las nubes no han regresado a sus niveles anteriores”, dijo Erandi Chávez, estudiante de posgrado en el Centro Harvard-Smithsonian de Astrofísica que dirigió el estudio como dijo en un comunicado un estudiante universitario de la Universidad de California, Berkeley. “Esto es extremadamente emocionante e inesperado, especialmente porque el período anterior de baja actividad de nubes de Neptuno no fue tan dramático y prolongado”.

La actividad del Sol sube y baja en ciclos de 11 años, pero recientemente, el Sol ha estado mucho más activo de lo esperado, con apariciones de manchas solares que casi duplican el número previsto por el Centro de Predicción del Clima Espacial de la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica. Los científicos anticipan que la actividad del sol, que inicialmente se pensó que alcanzaría su máximo en 2025, podría alcanzar su punto máximo a finales de este año.

Los astrónomos han relacionado la pérdida de la capa de nubes con los efectos de la luz solar que incide en la atmósfera de Neptuno. Al analizar los datos recopilados por el Telescopio Espacial Hubble, el Observatorio Keck en Hawaii y el Observatorio Lick en California, los astrónomos observaron que, luego de un retraso de dos años, los picos en la actividad del sol generan más nubosidad sobre Neptuno, mientras que las bajas lo hacen para disipar.

No se sabe con certeza qué está causando exactamente el cambio. La explicación más probable es que la luz ultravioleta del sol inicia reacciones químicas en la atmósfera superior de Neptuno, creando finalmente las nubes.

“Es fascinante poder utilizar telescopios en la Tierra para estudiar el clima de un mundo a más de 2.500 millones de millas de distancia de nosotros”, dijo en el comunicado el coautor del estudio Carlos Álvarez, astrónomo del Observatorio Keck. “Los avances en tecnología y observaciones nos han permitido limitar los modelos atmosféricos de Neptuno, que son clave para comprender la correlación entre el clima del gigante de hielo y el ciclo solar”.

Fuente: Live Science.

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