El clima cálido y seco en Texas este verano ha revelado una sorpresa inesperada. Los guardaparques del Parque Estatal Dinosaur Valley en Glen Rose detectaron alrededor de 70 huellas de dinosaurios que habían estado escondidas bajo el agua y el barro en el río Paluxy, que atraviesa el parque. Estiman que las huellas se remontan a unos 110 millones de años.
Cuando los dinosaurios vagaban por la Tierra, dejaban sus huellas en el barro, de forma muy parecida a como nosotros dejamos nuestras huellas en un sendero fangoso. Con el paso del tiempo, el barro alrededor de estas impresiones fue reemplazado por capas de arena y piedras, solidificándose gradualmente hasta convertirse en roca. Estas huellas fosilizadas son lo que observamos y nos maravillamos hoy en día en todo el mundo.
Las huellas recién encontradas pertenecen a dos tipos de dinosaurios llamados Acrocanthosaurus y Sauroposeidon. El primero, un terápodo, es conocido por tener huesos huecos, tres dedos y garras. El segundo, un saurópodo, tenía un cuello y una cola muy largos, una cabeza pequeña y cuatro patas, según el Museo de Historia Natural de Londres.
El Acrocanthosaurus fue uno de los depredadores más grandes de América del Norte durante el período Cretácico Inferior, que pasó de hace 145 millones a 101 millones de años. Los investigadores creen que habría cazado al Sauroposeidon. Se cree que el Parque Estatal Dinosaur Valley albergó a muchos dinosaurios, ya que esta no es la primera vez que se encuentran huellas.
Sequía reveladora
Paul Baker, un empleado que ayuda a limpiar y mapear huellas de dinosaurios en el parque en Texas, le dijo a CNN que “nunca antes había visto tantas huellas de dinosaurios”.
“Es emocionante ver algo que nadie más ha visto; en cierto modo, es casi como una búsqueda del tesoro. Pensé que había visto todas las huellas de dinosaurios que existen”, dijo Baker.
El parque, a una hora y media al sur de Dallas, es un punto de encuentro para los fanáticos de los dinosaurios y los turistas que normalmente van al río Paluxy, ahora seco debido a la sequía, para nadar y hacer kayak. Algunas partes de Texas han estado enfrentando una grave sequía desde junio, y un tercio del estado ahora se ve afectado por ella, según un informe reciente del US Drought Monitor.
Las huellas fueron vistas por primera vez por miembros de Friends of Dinosaur Valley State Park, una ONG que apoya el parque. En una publicación de Facebook, dijeron que ésta era la mayor cantidad de pistas que habían encontrado en The Ballroom, el sitio de pistas más grande del parque. El nombre se debe a las múltiples direcciones en las que se mueven las huellas, como si los dinosaurios estuvieran bailando. Glen Kuban, que ha trabajado en el parque durante más de 40 años, dijo a CNN que si bien la sequía dejó al descubierto las huellas, se necesitó mucho trabajo para hacerlas visibles.
“Las vías suelen estar bajo grandes cantidades de grava, arena y barro seco. A muchos voluntarios les lleva muchos días, en este caso semanas, eliminar el sedimento”, dijo.
Si bien el hallazgo es realmente emocionante y nos permite aprender más sobre los dinosaurios, la razón por la que se descubrieron las huellas (la sequía) no es algo que deba entusiasmarnos. Texas y otras partes de Estados Unidos están luchando con los efectos de la crisis climática, que podría agravarse si el mundo no reduce sus emisiones rápidamente.
Fuente: ZME Science.