Arqueólogos en México han descubierto una estatua de un guerrero maya de 1.000 años de antigüedad en el sótano de un templo en Chichén Itzá, en la península de Yucatán. La estatua representa a un guerrero con un casco con forma de serpiente con las fauces abiertas, así como un tocado de plumas, dijo el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) de México en un comunicado traducido. La estatua mide 33 centímetros de alto y 28 cm de ancho y, salvo una grieta, está en buen estado, según el comunicado. Es posible que la cabeza alguna vez haya sido parte de un diseño escultórico más grande.
Chichén Itzá floreció entre los siglos IX y XIII y cubre más de 300 hectáreas. En el centro del sitio, se eleva una pirámide conocida como El Castillo de 30 metros de altura. El sitio tiene muchos templos, así como un enorme campo de juego de pelota y un observatorio astronómico.
El sitio es un destino turístico popular, y en los últimos años, el INAH ha estado modificando y construyendo nuevos centros de visitantes y museos, así como una nueva línea de tren, conocida como el “Tren Maya”, cerca del sitio, señala el comunicado. La estatua fue encontrada durante los trabajos arqueológicos que acompañaron la construcción del ferrocarril. Durante este trabajo de construcción se han realizado una gran cantidad de otros hallazgos arqueológicos, incluidos alrededor de 660 entierros humanos, más de 1 millón de fragmentos de cerámica, restos de numerosas estructuras arquitectónicas y una variedad de otros artefactos, según el comunicado.
Fuente: Live Science.