Neuronas en la amígdala regulan el comportamiento social con desconocidos

Biología

Investigadores de la Universidad de Tsukuba han identificado neuronas que son esenciales para que los ratones puedan interactuar socialmente con individuos nuevos. Estas neuronas, que se encuentran en el núcleo central de la amígdala, expresan un receptor llamado NPBWR1. Además, este estudio revela que los polimorfismos genéticos en el gen humano NPBWR1 influyen en el comportamiento social cuando las personas interactúan con desconocidos. La investigación se publica en la revista Science Advances.

La capacidad de participar en nuevas interacciones sociales es vital para los animales sociales. Este comportamiento suele estar impulsado por una preferencia por interactuar con personas nuevas en lugar de con personas conocidas, lo que se conoce como “preferencia por la novedad social”. Este rasgo mejora la expansión de las redes sociales, pero también conlleva riesgos potenciales. Los mecanismos moleculares y neuronales que equilibran estos beneficios y riesgos han permanecido poco comprendidos hasta ahora.

Este estudio demuestra que la activación de las neuronas NPBWR1 en el núcleo central de la amígdala es crucial para que los ratones puedan interactuar socialmente con personas nuevas. Además, se demuestra que la activación de estas neuronas restaura la conducta social deteriorada por el estrés crónico por derrota social, que es un estrés psicológico causado por la agresión territorial entre ratones.

La investigación revela que la sobreexpresión del gen humano NPBWR1 en las neuronas NPBWR1 de ratón impidió el aumento típico de la actividad neuronal de las neuronas NPBWR1 que se produce cuando se encuentran individuos nuevos y conduce a una menor sociabilidad. Curiosamente, este efecto no se observa cuando el gen humano NPBWR1 lleva un polimorfismo de un solo nucleótido (SNP), lo que sugiere que las variaciones en el gen NPBWR1 podrían afectar a los rasgos de sociabilidad.

Estos hallazgos resaltan el papel de las neuronas NPBWR1 en la regulación de la preferencia por la novedad social y sugieren que los polimorfismos del gen humano NPBWR1 podrían influir en los rasgos de personalidad relacionados con la sociabilidad. Estos resultados también tienen implicaciones significativas para el descubrimiento de fármacos que se dirijan al receptor humano NPBWR1 y ofrezcan nuevos tratamientos potenciales para trastornos sociales como la depresión y el trastorno del espectro autista.

Fuente: Medical Xpress.

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