Una fábrica de adhesivo neandertal es hallada en cueva de Gibraltar

Humanidades

En la pared de un acantilado de Gibraltar con vistas al mar de Alborán se encuentra una cueva que nos lleva de regreso en el tiempo a uno de los primeros lugares de fabricación del planeta: un horno de destilación de alquitrán construido por neandertales y que estuvo oculto durante 65.000 años. Una investigación dirigida por la Universidad de Murcia ha descubierto una compleja estructura de hogar neandertal en la cueva de Vanguard. Los artefactos y residuos de piedra del Paleolítico Medio sugieren que los neandertales producían alquitrán a partir de plantas de jara (Cistaceae) en este lugar, lo que demuestra su avanzada capacidad tecnológica y de gestión del fuego.

Los neandertales utilizaban el fuego para calentarse, iluminarse, cocinar, limpiar el paisaje y extraer alquitrán adhesivo de determinadas plantas y árboles. La evidencia de su uso del fuego en la extracción de alquitrán se basa en la composición de los residuos de alquitrán que quedan en las herramientas.

El alquitrán se utilizaba como adhesivo para sujetar herramientas de piedra a mangos de madera, lo que representa un avance significativo en la fabricación de herramientas, anterior al uso actual de adhesivo de alquitrán por parte de los humanos modernos en más de 100.000 años. Aunque las técnicas que utilizaban los neandertales para extraer alquitrán se habían modificado previamente para sugerir el uso de pozos de fuego subterráneos, no se ha encontrado evidencia directa de estos pozos en los registros.

En el estudio actual, “La estructura de combustión especializada de un neandertal compatible con la obtención de alquitrán”, publicado en Quaternary Science Reviews, los investigadores analizaron una estructura de pozo de fuego en la cueva Vanguard, empleando métodos geoquímicos, mineralógicos, palinológicos y micromorfológicos.

Identificaron un pozo de fuego central con dos trincheras en lados opuestos, que revelaban una costra de rocas y sedimentos alterados debido al uso prolongado del fuego. Esta estructura se alinea con los modelos teóricos que requieren instalaciones de calefacción especializadas para la producción de alquitrán en condiciones de bajo oxígeno.

El análisis geoquímico orgánico reveló la presencia de levoglucosano y cantidades significativas de reteno en la matriz de la estructura, compuestos asociados con la combustión de materiales vegetales resinosos. El análisis de lípidos mostró n-alcanos de cadena lineal con números de carbono impares y n-alcanoles de números de carbono pares, biomarcadores indicativos de cera fresca de hojas de plantas como la jara.

El análisis del carbón descubrió restos parcialmente vitrificados de cistáceas, o plantas de la familia de las jaras, lo que sugiere una combustión incompleta en condiciones controladas. Menos del 10% del carbón procedía de madera de coníferas.

El examen palinológico indicó la presencia de abundantes granos de polen dentro de la estructura, mientras que los sedimentos circundantes estaban libres de polen. Esto sugiere la introducción deliberada de materiales vegetales en el hogar por parte de los neandertales. El análisis micromorfológico no mostró evidencia de calentamiento de arcilla por encima de los 500°C, lo que indica que la estructura se utilizó para procesos controlados de baja temperatura compatibles con la producción de alquitrán.

Las rocas carbonatadas dentro de la estructura parecen colocadas intencionalmente, probablemente empleadas para mantener un sello compuesto de guano y arena. Este sello crearía un entorno con poco oxígeno esencial para una destilación eficaz del alquitrán.

Para probar su hipótesis, el equipo realizó arqueología experimental construyendo una estructura similar y utilizándola para calentar hojas de jara en condiciones de poco oxígeno. El experimento produjo con éxito alquitrán suficiente para empuñar puntas de lanza de piedra, utilizando solo herramientas y materiales disponibles para los neandertales de la zona.

Los hallazgos muestran que los neandertales organizaban actividades complejas relacionadas con el fuego mediante la construcción de fogones especializados para la extracción de alquitrán. Esto confirma un nivel de complejidad cognitiva y desarrollo cultural que ya se esperaba en función del uso de materiales manufacturados.

Fuente: Phys.org.

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