Un ensayo clínico en adultos mayores con COVID-19 muestra que una dosis temprana de plasma sanguíneo de personas recuperadas ayuda a prevenir la progresión a una enfermedad grave.
El plasma de las personas que se han recuperado de COVID-19 contiene anticuerpos contra el SARS-CoV-2. Pero el tratamiento con dicho plasma ha tenido resultados mixtos, y algunos científicos han sugerido que el plasma debe administrarse al principio del curso de la enfermedad para que sea eficaz. Fernando Polack de la Fundación INFANT en Buenos Aires y sus colegas realizaron un ensayo clínico riguroso para evaluar el efecto del tratamiento con plasma dentro de las 72 horas posteriores al inicio de los síntomas. Los participantes incluyeron personas mayores de 75 años y personas entre 65 y 74 con al menos una condición preexistente como la diabetes.
Se desarrolló COVID-19 grave en el 16% de los 80 participantes del estudio que recibieron plasma y en el 31% de los 80 participantes del grupo placebo. El equipo descubrió que el plasma de un donante que contenía concentraciones más altas de anticuerpos contra el SARS-CoV-2 se asoció con una mayor reducción en el riesgo de desarrollar una enfermedad grave, lo que proporciona evidencia de que los propios anticuerpos son responsables del efecto terapéutico.
Fuente: Nature.