Se han detectado diferentes linajes de SARS-CoV-2 mezclando sus genomas a través de un proceso llamado recombinación.
La recombinación ocurre cuando una célula está infectada con múltiples linajes virales distintos y su material genético se mezcla a medida que se copia. Al analizar los datos de secuenciación del SARS-CoV-2 del Reino Unido, Ben Jackson de la Universidad de Edimburgo y sus colegas detectaron varios linajes que surgieron a través de la recombinación, que es común en los coronavirus.
Todos los linajes fueron productos de la recombinación entre el linaje B.1.1.7 de rápida propagación, que contiene 22 mutaciones distintivas y comenzó a convertirse en la cepa dominante del Reino Unido a fines de 2020, y otros linajes que circulan en el país. El equipo encontró evidencia de que cuatro de los ocho linajes identificados se habían extendido entre individuos.
Seis de los linajes recombinantes contienen la versión del gen de la espiga, que codifica la proteína que el virus usa para ingresar a las células hospedadoras, transportada por la variante B.1.1.7. Esta versión de pico alberga mutaciones que podrían ser la base de la transmisión mejorada de la variante. Sin embargo, los investigadores enfatizan que no hay evidencia de que la recombinación haya llevado a linajes que se alteren de manera importante, y el descubrimiento de linajes recombinantes no tiene implicaciones inmediatas para el curso de la pandemia. Los hallazgos aún no han sido revisados por pares.
Fuente: Nature.