No hace mucho, el teflón surgió como un material maravilloso para los utensilios de cocina y no es difícil entender por qué. Es antiadherente, cocina bien y es confiable. Pero es posible que la durabilidad y la salud no brillen cuando se trata de teflón.
En un nuevo estudio, los investigadores encontraron millones de partículas de plástico emergiendo de una sartén de teflón agrietada, e incluso una pequeña grieta liberó más de 9000 piezas de plástico. Si alguna vez has usado una sartén de teflón durante mucho tiempo, probablemente hayas notado que con el tiempo comienza a desgastarse. Comienza a perder parte de su factor antiadherente y también puede agrietarse. La mayoría de la gente no presta mucha atención a este tipo de cosas y es comprensible.
“El teflón, material de revestimiento antiadherente, suele ser un miembro de la familia de los PFAS”, afirma el investigador Dr. Cheng Fang de la Universidad de Newcastle.
“Dado que las PFAS son una gran preocupación, estas micropartículas de teflón en nuestros alimentos podrían ser un problema de salud, por lo que es necesario investigarlas porque no sabemos mucho sobre estos contaminantes emergentes”.
Los PFAS, que significan sustancias perfluoroalquiladas y polifluoroalquiladas, son un grupo de sustancias químicas sintéticas que se utilizan desde la década de 1940. Se utilizan en una amplia gama de productos por sus propiedades resistentes al agua y a la grasa. Los PFAS han llegado a una serie de productos, incluidos utensilios de cocina antiadherentes, ropa repelente al agua e incluso en algunos envases de alimentos. Sin embargo, las PFAS han generado preocupación porque son muy persistentes en el medio ambiente y en el cuerpo humano, lo que les valió el sobrenombre de “sustancias químicas eternas”.
El nuevo estudio se centró en utensilios de cocina de teflón rayados. Los investigadores utilizaron una técnica llamada imágenes Raman para visualizar cómo una pequeña grieta o corte en dichos utensilios de cocina podría liberar partículas de plástico. En las imágenes Raman, se enfoca un láser sobre una muestra y la luz dispersada por la muestra se recolecta y analiza. A diferencia de los métodos tradicionales de obtención de imágenes que proporcionan solo información espacial, las imágenes Raman brindan información tanto espacial como química.
El estudio demostró que un revestimiento roto puede “conducir a la liberación de 2.300.000 microplásticos y nanoplásticos” e incluso una sola grieta en la superficie podría “dejar aproximadamente 9.100 partículas de plástico”.
“Esto nos advierte con firmeza de que debemos tener cuidado al seleccionar y utilizar los utensilios de cocina para evitar la contaminación de los alimentos”, afirma el profesor Youhong Tang, de la Facultad de Ciencias e Ingeniería de la Universidad de Flinders. Tang también destacó la importancia de realizar más investigaciones al respecto.
“Se recomienda realizar más investigaciones para abordar la evaluación de riesgos de los microplásticos y nanoplásticos de teflón, dado que el teflón es un miembro de la familia de las PFAS”.
A la luz de estos hallazgos, queda claro que si bien el teflón puede ofrecer la conveniencia de cocinar con antiadherente, la compensación podría ser mucho más importante que un desayuno arruinado. Como material que pertenece a la familia de las PFAS, aún no se comprenden completamente sus implicaciones a largo plazo tanto para la salud humana como para la sostenibilidad ambiental.
Fuente: ZME Science.