Según un nuevo informe, al menos 2.456 cabilderos de los combustibles fósiles han tenido acceso a la cumbre COP28 que se celebra actualmente en Dubái. Se trata de una asistencia sin precedentes de personas vinculadas al sector del petróleo, el gas y el carbón a una conversación crucial sobre el clima, que se supone debe avanzar en la acción climática. Más bien, está abriendo la puerta a los contaminadores.
En un año de temperaturas globales y emisiones de gases de efecto invernadero sin precedentes, ha habido una explosión de cabilderos de combustibles fósiles que asistieron a las negociaciones climáticas de la ONU en los Emiratos Árabes Unidos (EAU), casi cuatro veces más que los que tuvieron acceso el año pasado. Este aumento coincide con la COP28, en la que los combustibles fósiles y su eliminación son un punto focal.
Los Emiratos Árabes Unidos son un importante productor y exportador de combustibles fósiles y, a pesar de ello, fueron elegidos para albergar la cumbre climática de este año, pero la situación empeora. El presidente de la COP28 es Sultan Al Jaber, director ejecutivo del gigante petrolero estatal Abu Dhabi National Oil Company, una de las 12 compañías petroleras más grandes del mundo. Incluso ha intentado cerrar acuerdos petroleros durante la cumbre.
El nuevo informe, escrito por la coalición Kick Big Polluters Out (KBPO), encontró que el número de cabilderos de la industria de los combustibles fósiles con acceso a la COP28 es mucho mayor que el número de personas en cada delegación de casi todos los países. Los cabilderos de los combustibles fósiles sólo son superados en número por las 3.081 personas aportadas por Brasil y los 4.409 participantes de los Emiratos Árabes Unidos.
“La presencia venenosa de los grandes contaminadores nos ha estancado durante años, impidiéndonos avanzar por los caminos necesarios para mantener los combustibles fósiles bajo tierra. Son la razón por la que la COP28 está envuelta en una niebla de negación climática, no de realidad climática”, dijo en un comunicado de prensa Alexia Leclercq, cofundadora de Start Empowerment, una ONG.
Un ambiente contaminado
La coalición Kick Big Polluters Out analizó la lista provisional de participantes de la COP28 y descubrió que los cabilderos de los combustibles fósiles recibieron más pases para la COP28 que todos los delegados de las diez naciones más vulnerables al clima juntas (1509). Esto subraya cómo la presencia de la industria eclipsa a la de quienes están en la primera línea de la crisis, argumentaron.
Un gran número de cabilderos de los combustibles fósiles tuvieron acceso a la COP como parte de una asociación comercial. Nueve de los diez grupos más grandes procedían del Norte Global. La más grande fue la Asociación Internacional de Comercio de Emisiones (IETA), con sede en Ginebra, que reunió a 116 personas, incluidos representantes de Shell, Total Energies y Equinor.
También se ha permitido la participación en la COP28 a más de siete veces más cabilderos de combustibles fósiles que representantes indígenas oficiales (316), según el informe. Francia trajo gigantes de los combustibles fósiles como TotalEnergies y EDF como parte de su delegación nacional, Italia trajo un equipo de representantes de EMI y la UE trajo empleados de BP y Exxon.
“Estos hallazgos nos dicen que la dinámica dentro de estos espacios sigue siendo fundamentalmente colonial. No sorprende que la mayoría de las empresas que influyen en estas negociaciones provengan del Norte Global. En los últimos años, las COP se han convertido en una vía para que muchas empresas se laven de verde”, dijo en un comunicado de prensa Caroline Muturi de IBON Africa, una ONG.
Los investigadores creen que es probable que su estimación sea conservadora. KBPO sólo cuenta a los delegados que revelan abiertamente sus conexiones con los intereses de los combustibles fósiles, y no a aquellos que acceden a las conversaciones utilizando una afiliación profesional diferente. KBPO también se basó únicamente en fuentes públicas, como sitios web de empresas, cobertura de noticias o bases de datos.
El número de representantes de los combustibles fósiles en las negociaciones climáticas de la ONU ha ido aumentando con el tiempo, aunque la industria ha estado presente desde sus inicios. Estos hallazgos se basan en los llamados de los últimos años para proteger las negociaciones climáticas de la ONU mediante el establecimiento de políticas claras de conflicto de intereses y medidas de rendición de cuentas, argumentaron los investigadores.
Este año, por primera vez, gracias a la presión sostenida de la sociedad civil, los asistentes a la COP28 han tenido que revelar a quién representan, exponiendo a muchos cabilderos que probablemente habrían asistido a COP anteriores de incógnito. El año pasado, el análisis de KBPO mostró que al menos 636 cabilderos de combustibles fósiles tuvieron acceso a la COP27.
“Los cabilderos y líderes de los combustibles fósiles están desplegando activamente tácticas engañosas para engañar al público y a los formuladores de políticas, sembrar dudas sobre la ciencia climática y obstruir la acción climática crítica. Su agenda es muy clara: salvaguardar sus ganancias a expensas de un futuro habitable para todos”, dijo en un comunicado de prensa Kathy Mulvey, directora de campaña de la Unión de Científicos Preocupados.
Fuente: ZME Science.
