Investigadores descubren el río perdido que ayudó a construir las pirámides de Egipto

Geología

Construir en el desierto no suele tener mucho sentido. Transportar materiales es difícil, especialmente si estás construyendo estructuras masivas como las pirámides, por lo que necesitarías una vía fluvial para transportar cosas más fácilmente. Pero ahora no hay ninguna vía fluvial alrededor de las pirámides, y esto ha desconcertado a los investigadores durante bastante tiempo.

Algunos científicos creían que debía haber existido un antiguo brazo del Nilo, y ahora tenemos la confirmación. Un nuevo estudio que combinó varios tipos de datos encontró que las pirámides de Egipto se construyeron alrededor de un antiguo brazo del Nilo que alguna vez fluyó cerca de las pirámides. Ha sido denominada Rama Ahramat (“pirámides” en árabe). Este descubrimiento arroja luz sobre cómo los antiguos egipcios podrían haber transportado materiales y mano de obra a estas estructuras icónicas.

Un viaje por el Nilo
Tendemos a pensar que la geología es estática e inamovible, pero la realidad es mucho más dinámica. Los ríos abren nuevos caminos, los afluentes se ramifican y luego se secan, y los paisajes se transforman a lo largo de siglos y milenios. Estos cambios son especialmente significativos en regiones como Egipto, donde los brazos cambiantes del río Nilo han desempeñado un papel crucial en la configuración de la historia humana.

El norte del valle del Nilo, que se extiende desde Lisht en el sur hasta la meseta de Giza en el norte, ha sufrido importantes cambios ambientales a lo largo de los milenios. Hace unos 12.000 años, durante el Holoceno temprano, el Sahara pasó de ser un desierto hiperárido a un entorno similar a una sabana, sustentado por el aumento del nivel global del mar. Este período, conocido como Período Húmedo Africano (AHP), vio florecer los ríos y lagos del Sahara. Mientras tanto, el valle del Nilo era en gran medida inhóspito debido a los altos niveles de los ríos y las condiciones pantanosas.

Unos miles de años después, el Nilo es un lugar diferente. Hay mucha más agua dulce en él. Y la llanura aluvial del Nilo es un lugar fértil que invita a la habitación humana a lo largo de los márgenes del desierto. Avancemos un poco más, hasta hace 5.500 años, y la aridez alrededor del Nilo está aumentando. La gente ya depende del río, por lo que se acerca cada vez más a él, estableciéndose en áreas elevadas, comenzando el Período del Reino Antiguo (~2686 a. C.).

Aquí también comenzó la construcción de los primeros complejos piramidales. Los egipcios trajeron materiales utilizando un canal para construir las magníficas estructuras que vemos hoy. Todo esto tendría mucho sentido, pero los investigadores no habían podido encontrar esta vía fluvial… hasta ahora.

Encontrar el río perdido

Créditos de las imágenes: Eman Ghoneim et al (2024) / Nature.

Los estudios geofísicos utilizando radar de penetración terrestre (GPR) y tomografía electromagnética (EMT) revelaron un canal de río oculto debajo de la llanura aluvial moderna, de acuerdo con las imágenes satelitales de radar de Ahramat Branch. Básicamente, las imágenes de satélite mostraron paisajes consistentes con el brazo de un río. Los estudios geofísicos mostraron la posición de los sedimentos y otras rocas asociadas con el ramal, y los núcleos de suelo la confirmaron.

El equipo confirmó que el ramal de Ahramat tenía alrededor de 64 kilómetros de largo y hasta 700 metros de ancho. Corría directamente hacia las pirámides, vecina a no menos de 31 pirámides. Esto explicaría perfectamente por qué se construyeron tantas pirámides allí precisamente. En aquel entonces, no era una zona inhóspita del Sahara: había un río que desembocaba en ella.

Durante los primeros días del Reino Antiguo, la Rama Ahramat tenía un alto nivel de agua, lo que permitía el transporte de enormes bloques de piedra caliza y otros materiales necesarios para la construcción de pirámides. A medida que los niveles del agua fluctuaban, la posición de las pirámides se ajustó en consecuencia. Por ejemplo, la proximidad de las pirámides doblada y roja al desierto sugiere un alto nivel de agua durante su construcción, mientras que las pirámides posteriores construidas más cerca de la llanura aluvial indican niveles de agua más bajos. Luego, un período de sequía y desertificación contribuyó al eventual abandono de la sucursal de Ahramat. Ha dejado huellas del brazo del río ahora sepultadas bajo el paisaje moderno.

Esta rama perdida hace mucho tiempo, escondida bajo la llanura aluvial moderna, jugó un papel crucial en la construcción de las pirámides y la vida cotidiana de los antiguos egipcios. Al descubrir esta antigua vía fluvial, los investigadores no sólo han resuelto un misterio histórico sino que también han proporcionado nuevas perspectivas sobre el paisaje ambiental y cultural del antiguo Egipto.

El Nilo era el sustento del antiguo Egipto y, hasta el día de hoy, sigue siendo un sustento. Si bien el río cambia y se desplaza, sigue siendo tan importante hoy como lo fue hace miles de años.

El estudio fue publicado en Nature.

Fuente: ZME Science.

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