Una prueba innovadora que combina un sistema de extracción de ADN inspirado en una impresora 3D modificada (PrintrLab) con amplificación molecular isotérmica mediada por bucle (LAMP) podría utilizarse para detectar la infección por T. cruzi, responsable de la enfermedad de Chagas, en recién nacidos. Ésta es la conclusión de un estudio de prueba de concepto realizado en el Chaco boliviano, zona endémica de la enfermedad de Chagas. El estudio fue coordinado por el Instituto de Salud Global de Barcelona (ISGlobal) en colaboración con la Fundación CEADES (Bolivia), CONICET-INGEBI (Argentina), AI Biosciences (EE.UU.), FIND (Suiza) y la Fundación Mundo Sano (Argentina).
El estudio se publica en la revista The Lancet Microbe. El 20% de los nuevos casos de enfermedad de Chagas se deben a transmisión vertical (o congénita). Esto ocurre cuando una madre infectada le transmite el parásito a su bebé durante el embarazo. Por tanto, la detección temprana del parásito en mujeres y recién nacidos es una prioridad de salud pública. El problema es la falta de pruebas sencillas, rápidas y fiables.
En países de ingresos altos como España, el diagnóstico neonatal se puede realizar mediante PCR, pero se trata de un método caro que requiere personal cualificado. En las regiones endémicas se realizan hasta dos pruebas de microscopía (al nacer y a los dos meses), que tienen baja sensibilidad y deben ir seguidas varios meses después de una prueba serológica para detectar anticuerpos contra el parásito. El número de pruebas y el desfase entre ellas aumenta el riesgo de que los niños no reciban el tratamiento que necesitan.
“En regiones endémicas sería muy útil disponer de una prueba sencilla, rápida y sensible para detectar el parásito en los recién nacidos, cuando el tratamiento es más eficaz”, explica Julio Alonso-Padilla, investigador de ISGlobal.
Más sensato que la microscopía
En este estudio, un equipo liderado por Alonso-Padilla evaluó una innovadora prueba de diagnóstico que combina una técnica de amplificación molecular simple (LAMP) desarrollada por la empresa japonesa Eiken, con una impresora 3D modificada para extraer ADN de una pequeña muestra de sangre (PrintrLab). Los resultados se compararon con los de la PCR y los métodos de diagnóstico “estándar” (microscopía y serología).
El estudio incluyó a 224 bebés nacidos de madres seropositivas para T. cruzi y se les dio seguimiento durante ocho meses. Se detectaron un total de 23 casos de transmisión congénita (nueve mediante microscopía al nacer y otros 14 mediante serología ocho meses después). LAMP pudo detectar 13 de los 23 casos de manera temprana (es decir, cuatro casos adicionales a los detectados por microscopía), y PCR pudo detectar 14 de los 23 (cinco casos adicionales).
“Esto demuestra que la sensibilidad de PrintrLab-LAMP es mayor que la de la microscopía y casi igual a la de la PCR”, afirma Alonso-Padilla. La ventaja es que PrintrLab debería ser más barato que PCR y requiere una infraestructura mínima.
Siguiendo las directrices del país para el diagnóstico y tratamiento de la enfermedad de Chagas congénita, todos los recién nacidos infectados fueron tratados y curados, destacando la importancia de la detección y el tratamiento tempranos. El equipo de investigación señala que se trataba de una prueba de concepto para demostrar la viabilidad de la prueba PrintrLab-LAMP, y que ahora es necesario probarla a mayor escala y en un mayor número de centros. Si se confirma su potencial, la prueba también podría ser útil para detectar infecciones agudas en adultos o evaluar la eficacia del tratamiento.
Fuente: Medical Xpress.