La taurina es un aminoácido que se produce de forma natural en el cuerpo y se encuentra en las bebidas energéticas, así como en alimentos como el pescado y la carne. Si bien tiene ciertos beneficios para el cuerpo , un nuevo estudio sugiere que también es una fuente de combustible importante para impulsar cánceres como la leucemia.
Dirigido por un equipo del Centro Médico de la Universidad de Rochester (UR Medicine), el estudio analizó el comportamiento de las células leucémicas y descubrió que podían tomar taurina de la médula ósea circundante y usarla para crecer más rápido. Esto les proporciona un impulso de crecimiento, similar al que nos da una bebida energética para estar más alertas.
Cuando los investigadores bloquearon el acceso a la taurina en modelos murinos y trasplantaron células leucémicas de humanos o ratones, se suprimió el crecimiento del cáncer. Esto sugiere que la taurina podría ser útil en el tratamiento de algunos tipos de cáncer, como la leucemia.
“Los niveles locales de taurina en la médula ósea pueden aumentar el crecimiento de la leucemia, lo que sugiere precaución en el uso de suplementos de taurina en dosis altas”, afirma la oncóloga Jane Liesveld, de UR Medicine.
Es la suplementación, a través de fuentes como las bebidas energéticas, lo que preocupa a los investigadores. Aún es pronto para conectar estos puntos, pero administrar taurina adicional al cuerpo podría no ser la mejor idea para prevenir el cáncer.
Sin embargo, será necesario investigar más a fondo cómo funciona todo esto. Aún no está claro cómo podría funcionar en humanos ni qué impacto podría tener la taurina adicional fuera de la médula ósea.
Sin embargo, cada tipo de cáncer tiene un contexto diferente. La taurina también es conocida por reforzar el sistema inmunitario de ciertas maneras, y estudios previos han demostrado que puede ayudar a combatir el cáncer gástrico.
Comprender mejor el metabolismo de los cánceres y cómo sobreviven y proliferan es una parte cada vez más importante de la investigación oncológica. Sabemos que las mutaciones genéticas pueden provocar un crecimiento descontrolado de los cánceres, pero no es el único truco de la enfermedad.

Nature, 2025.
“La reprogramación metabólica es un sello distintivo del cáncer y estamos apenas comenzando a comprender los efectos metabólicos en las células leucémicas”, afirma Liesveld.
“Anteriormente, el enfoque se ha centrado en los cambios genéticos, pero ahora se está ampliando para comprender cómo las células leucémicas pueden secuestrar diversas vías metabólicas para su propia supervivencia”.
Si bien las bebidas energéticas sin duda funcionan como se anuncia (proporcionando una breve inyección de energía), existe una creciente preocupación por los riesgos para la salud que presentan estas bebidas, que se han vinculado con enfermedades cardíacas y deterioro cognitivo en estudios anteriores. Es posible que a esa lista de posibles desventajas se sumen los riesgos de cáncer, aunque el alto contenido de azúcar y cafeína probablemente sea un problema de salud más acuciante que la taurina. Lo más significativo de estos descubrimientos es que las células cancerosas podrían detenerse cortando la dieta energética.
Los cánceres mieloides, como la leucemia, interfieren con el funcionamiento normal de las células sanguíneas y pueden progresar rápidamente y ser difíciles de tratar. Cualquier medida que podamos tomar para ralentizarlos probablemente mejorará las tasas de recuperación.
“Estamos muy entusiasmados con estos estudios porque demuestran que dirigir la captación por parte de las células de leucemia mieloide puede ser una nueva vía posible para el tratamiento de estas enfermedades agresivas”, afirma la bióloga de células madre y cáncer Jeevisha Bajaj, de UR Medicine.
“Nuestros datos actuales sugieren que sería útil desarrollar formas estables y efectivas de impedir que la taurina entre en las células leucémicas”.
La investigación ha sido publicada en Nature.
Fuente: Science Alert.