La NASA despliega vela de nave espacial experimental propulsada sólo con luz

Astronáutica

Aquellos de ustedes que siguen el Sistema Avanzado de Vela Solar Compuesta pueden haber oído que sus brazos y vela ya están desplegados. Está recibiendo una ligera presión del Sol para impulsarlo a través del Sistema Solar.

Como un piloto de pruebas en una nueva aeronave, la NASA ahora está probando cómo se maneja. Antes del despliegue, la nave espacial se movía lentamente y ahora los controladores verán si pueden controlarla y usar la potencia de las velas. La reflectividad de la vela significa que es fácil verla en el cielo nocturno, solo tienes que abrir la aplicación de la NASA para averiguar dónde buscar.

Las velas solares son una ingeniosa técnica de propulsión que emplea la presión de la luz solar para generar bajos niveles de empuje. A medida que los fotones de luz golpean la superficie, transfieren impulso a la vela solar y, por lo tanto, la nave espacial se acelera.

El empuje es pequeño, pero cuando se aplica durante largos períodos de tiempo puede proporcionar una forma muy eficiente de propulsar naves espaciales pequeñas. El primer despliegue exitoso de una vela se produjo en 2010 con la nave espacial IKAROS (Interplanetary Kite-craft Accelerated by Radiation of the Sun) lanzada por la agencia espacial japonesa JAXA.

El Sistema avanzado de velas solares compuestas (ACSSS) fue desarrollado por la NASA para probar la tecnología. El brazo que sostiene la vela está hecho de materiales compuestos más ligeros y duraderos.

Sonda espacial KAROS con vela solar en vuelo (representación artística) que muestra una configuración típica de vela cuadrada. Andrzej Mirecki/Wikimedia Commons.

Al probar el despliegue de los brazos y el funcionamiento eficiente de la vela, la NASA espera demostrar la viabilidad de la tecnología. El ACSSS utiliza materiales más ligeros y flexibles que los intentos anteriores y permitirá una exploración del espacio profundo más eficiente, el encuentro con asteroides y otras misiones que requieren una propulsión de bajo empuje. El ACSSS orbita la Tierra en una órbita baja con una altitud de entre 500 y 600 kilómetros.

Después del lanzamiento, se soltó deliberadamente sin control de actitud y, como resultado, estaba dando volteretas en el espacio. Una vez que se haya completado el análisis y se haya entendido el despliegue del brazo y la vela, el equipo volverá a activar el control de actitud para estabilizar la nave espacial. La siguiente fase comienza cuando el equipo analiza el manejo y la dinámica del vuelo para ajustar la órbita de la nave espacial.

La vela solar desplegada mide aproximadamente unos 9 metros de lado. NASA

Desde el despliegue de la vela, el equipo de operaciones continúa recibiendo imágenes y datos que los ayudan a comprender cómo se ha desplegado la tecnología de la pértiga. Hasta ahora, todo parece indicar que todo va bien para demostrar el despliegue y las operaciones iniciales.

El equipo continuará monitoreando y analizando los datos e imágenes entrantes en preparación para más pruebas y demostraciones de tecnología en la próxima semana. Cualquier observador del cielo con buen ojo podrá detectar la nave espacial cuando pase por encima. La alta reflectividad de la vela la hará claramente visible a simple vista.

La NASA ha agregado una nueva función a su aplicación para que los usuarios puedan configurar notificaciones para recibir alertas cuando sea visible desde su ubicación. La NASA invita al público a compartir sus imágenes de la nave espacial en línea usando el hashtag #SpotTheSail.

Fuente: Science Alert.

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