Un equipo de geólogos afiliados a varias instituciones de Francia, en colaboración con un par de colegas de Albania, ha medido el mayor flujo natural de hidrógeno jamás registrado en una mina de cromo albanesa. En su estudio, publicado en la revista Science, el grupo midió el gas hidrógeno que burbujeaba a través de charcos líquidos en la mina.
El gas hidrógeno es incoloro, inodoro y extremadamente inflamable. A menudo se ha utilizado como fuente de combustible. Más recientemente, se ha considerado como una alternativa a los combustibles basados en carbono porque su combustión no produce gases de efecto invernadero.
Actualmente, el hidrógeno se obtiene capturándolo a medida que se libera durante la extracción de gas natural; también se puede producir mediante una variedad de procesos, muchos de los cuales implican la liberación de gases de efecto invernadero. Los investigadores sugieren que un mejor enfoque sería aprovechar las reservas naturales de hidrógeno, como la que se encuentra debajo de la mina Bulqizë en Albania.
Investigaciones anteriores han demostrado que hay un gran depósito de hidrógeno debajo de la mina en Albania, y se originó cuando una porción de la corteza terrestre se desplazó hace millones de años, empujándola hacia arriba y hacia la corteza contigua. La extensión de tierra resultante formó una especie de cinturón rocoso conocido como ofiolita. Se han descubierto varias ofiolitas de este tipo en todo el mundo, y se cree que la mayoría de ellas albergan depósitos de hidrógeno.
En este nuevo estudio, los investigadores respondieron a informes de grandes cantidades de hidrógeno que se filtraban a través de los respiraderos y burbujeaban en las piscinas de drenaje de la mina; Se han reportado varias explosiones. Midieron la filtración en varios sitios de la mina y utilizaron los resultados para producir una estimación de la cantidad total de hidrógeno que se escapa; sus números indicaron que aproximadamente 200 toneladas métricas escapan de la mina cada año, lo que lo convierte en el flujo natural más grande jamás documentado. El equipo de investigación concluye que se requiere nueva tecnología para aprovechar dichos depósitos con el fin de capturar grandes cantidades de hidrógeno de una manera limpia y económica, quizás reduciendo la dependencia de combustibles a base de carbono.
Fuente: Phys.org.