El James Webb publica 19 fotos deslumbrantes de galaxias en espiral

Astronáutica

“Las nuevas imágenes de Webb son extraordinarias”, afirmó Janice Lee, científica de proyectos de iniciativas estratégicas en el Instituto de Ciencias del Telescopio Espacial de Baltimore. Son tan buenas que incluso para los investigadores que han estudiado galaxias durante décadas, siguen siendo alucinantes. “Las burbujas y los filamentos se resuelven hasta las escalas más pequeñas jamás observadas y cuentan una historia sobre el ciclo de formación estelar”.

Las galaxias espirales son un tipo de galaxia común. También vivimos en una galaxia espiral: la Vía Láctea. Todavía hay mucho que no sabemos sobre estas galaxias, particularmente en lo que respecta a cómo se forman y evolucionan las estrellas dentro de ellas.

Una ráfaga galáctica

El Telescopio Espacial James Webb observó 19 galaxias espirales cercanas cara a cara en luz infrarroja cercana y media como parte de sus contribuciones al programa de Física a Alta Resolución Angular en Galaxias Cercanas (PHANGS). Créditos de las imágenes: NASA, ESA, CSA, STScI, Janice Lee (STScI), Thomas Williams (Oxford), equipo PHANGS, Elizabeth Wheatley (STScI).

Estas 19 fotografías muestran millones o posiblemente incluso miles de millones de estrellas individuales, agrupadas en alrededor de 100.000 cúmulos estelares. Las galaxias que destacó el JWST se estudian en un programa llamado Física de alta resolución angular en galaxias cercanas (PHANGS). PHANGS ha estado funcionando durante algún tiempo, utilizando datos del Telescopio Hubble y un par de observatorios más. Pero el JWST permite a los astrónomos ver las galaxias en diferentes longitudes de onda, lo que les permite estudiar diferentes parámetros de las galaxias.

La más cercana de las 19 galaxias se llama NGC5068 y está a unos 15 millones de años luz de la Tierra. NGC5068 es una galaxia de “campo”, lo que significa que no forma parte de otro grupo o cúmulo de galaxias. La galaxia más lejana del grupo es NGC1365, a unos 60 millones de años luz de la Tierra. Entonces, cuando decimos que estas galaxias son “cercanas ” todo es relativo.

Además de ser absolutamente impresionantes visualmente, las imágenes permitirán a los investigadores observar procesos estelares que normalmente están oscurecidos. El JWST opera principalmente en el espectro infrarrojo, lo que le permite mirar a través de las nubes de polvo que a menudo oscurecen las primeras etapas de formación estelar en luz visible. Dado que las estrellas recién formadas están envueltas en polvo y gas, las observaciones infrarrojas son cruciales para estudiar estos objetos estelares nacientes. Los sensibles instrumentos del JWST pueden detectar el tenue brillo de estas formaciones, proporcionando información sobre sus propiedades y los procesos en juego.

La galaxia espiral NGC 1512 está a 30 millones de años luz de distancia, en la constelación del reloj. Créditos de las imágenes: NASA, ESA, CSA, STScI, Janice Lee (STScI), Thomas Williams (Oxford), equipo PHANGS, Elizabeth Wheatley (STScI).

“Estos datos son importantes porque nos dan una nueva visión de la fase más temprana de la formación estelar”, dijo el astrónomo de la Universidad de Oxford Thomas Williams, quien dirigió el procesamiento de datos de las imágenes por parte del equipo.

La galaxia espiral NGC 1087 se encuentra a 80 millones de años luz de distancia, en la constelación de la Ballena. Créditos de las imágenes: NASA, ESA, CSA, STScI, Janice Lee (STScI), Thomas Williams (Oxford), equipo PHANGS, Elizabeth Wheatley (STScI).

Con su gran espejo primario de 6,5 metros, el JWST también cuenta con una resolución y sensibilidad sin precedentes. Esto permite a los astrónomos observar galaxias distantes con exquisito detalle, incluidas las estructuras a pequeña escala donde se produce la formación de estrellas. Al resolver regiones individuales de formación de estrellas dentro de las galaxias, los científicos pueden estudiar las condiciones y mecanismos que conducen al nacimiento de estrellas, ofreciendo pistas sobre cómo evolucionan las galaxias con el tiempo.

“Siento que nuestro equipo vive en un estado constante de estar abrumado, de manera positiva, por la cantidad de detalles de estas imágenes”, añadió Williams.

Las observaciones del JWST ayudarán a los astrónomos a estudiar no sólo las estrellas mismas sino también el medio interestelar a partir del cual se forman. Esto incluye nubes de gas y polvo, así como la compleja interacción de procesos físicos y químicos que facilitan la formación de estrellas. Al comprender estos componentes básicos, los científicos pueden reconstruir una imagen más completa de cómo se desarrollan las galaxias.

El JWST tiene múltiples misiones. Desde mirar el corazón mismo del universo y observar las primeras galaxias y agujeros negros hasta estudiar nuestro propio sistema solar, no falta información valiosa procedente del telescopio. Está abriendo una nueva ventana al universo.

Fuente: ZME Science.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *