Cinco canoas encontradas en el fondo del mar Mediterráneo fueron utilizadas hace más de 7.000 años para pescar y transportarse por personas que vivían en un pueblo neolítico cerca de lo que hoy es Roma. Los arqueólogos descubrieron los barcos frente a la costa de Italia en La Marmotta, un asentamiento costero prehistórico que ahora se encuentra bajo el agua, mientras realizaban excavaciones en curso, según un estudio publicado el miércoles 20 de marzo en la revista PLOS One. Las grandes canoas, construidas con aliso, roble, álamo y haya europea, se construyeron entre 5700 y 5100 a.C., según reveló la datación por radiocarbono. Los barcos son los más antiguos jamás encontrados en el Mediterráneo, según un comunicado.
“Uno de los [barcos] más pequeños probablemente se usó para pescar”, dijo a Live Science en un correo electrónico el coautor del estudio Mario Mineo, arqueólogo y coordinador director del Museo de la Civilización de Roma. “Los dos más grandes medían casi 11 metros de largo por 1,2 m de ancho y es probable que, gracias también al fácil acceso a la costa del Tirreno a través del río Arrone, pudieran haber sido utilizados para el comercio”.
Los constructores de barcos también utilizaron “técnicas de construcción avanzadas” para fabricar las embarcaciones. Por ejemplo, incorporaban refuerzos transversales, lo que habría aumentado la durabilidad de los cascos de las canoas, según el comunicado.
“Las técnicas y materiales de construcción utilizados indican una comprensión sofisticada de la construcción de barcos y la navegación”, dijo a Live Science el autor principal del estudio, Niccolò Mazzucco, investigador principal del Departamento de Civilizaciones y Formas de Conocimiento de la Universidad de Pisa en Italia, en un correo electrónico. “[Esto] es importante porque muestra el ingenio y la habilidad de los pueblos antiguos en la utilización de recursos naturales para crear medios de transporte eficientes”.
Por ejemplo, los investigadores creen que las embarcaciones pueden haber estado equipadas con “velas o estabilizadores”, o flotadores de apoyo paralelos, dijo Mazzucco. Esto se puede evidenciar en tres objetos de madera en forma de T encontrados en el sitio cerca de las canoas. Cada uno de estos elementos contenía varios agujeros, que probablemente se utilizaban para “sujetar cuerdas atadas a velas u otros elementos náuticos”, según el comunicado.
“Estos avances sugieren una comprensión más profunda de la tecnología y la navegación marítimas, con embarcaciones equipadas para viajes de larga distancia”, añadió Mazzucco. “Sin embargo, nuestro conocimiento actual no llega a identificar con precisión los tipos de embarcaciones utilizadas, sus métodos de construcción y cómo se montaban juntos componentes como canoas y objetos de madera en forma de T, ya sea mediante cuerdas, clavijas de madera u otros medios”.
También es destacable la capacidad de los constructores para incluir múltiples tipos de madera en sus creaciones, ya que demuestra que sabían qué “árboles podrían usarse para construir las piraguas”, dijo Mazzucco. “En contraste, en otros sitios [Neolíticos] donde se ha encontrado más de una canoa, generalmente se usaba la misma especie [de árbol] para todas ellas”.
Además de los barcos, los arqueólogos encontraron numerosos artefactos esparcidos por el sitio, incluidas herramientas de pedernal y obsidiana, vasijas de cerámica, figurillas y adornos, según el estudio. En 2022, los investigadores también encontraron en el lugar 52 hoces de madera que se utilizaban para cosechar cereales.
“Estos artefactos ofrecen más información sobre la vida cotidiana y las capacidades simbólicas y tecnológicas de los antiguos habitantes”, dijo Mazzucco. “Ningún otro lugar en el Mediterráneo presenta tal cantidad de herramientas de recolección”.
Fuente: Live Science.
